El reto del equilibrio en pacientes con doble patología

La intervención con programas de tratamiento emocional breve, aspira a ser un reto, si lo que se pretende es una recuperación progresiva y mantenida en el tiempo. Aunque, pueda parecer utópico, el lograrse a medio plazo (seis meses), no es inalcanzable a lo largo del tiempo (un año). Sin embargo, ¿Entonces sería posible, que las personas con patología dual (PD) trastorno de adicciones y trastorno mental  lo consiguieran? Aquí, puede plantearse controversia. Por un lado, estarían los profesionales que lo considerarían con gran dificultad su realización y no llevarse a la práctica, y  por otro, aquellos especializados en el tema, que consideran que sí es posible lograrlo, sobretodo, cuando se verifica dicha posibilidad mediante evidencia científica.

Para constatar esto último, se refleja una investigación empírica “El desarrollo de la estabilidad emocional en patología dual: una propuesta de intervención breve”,  llevado a cabo en colaboración con la Fundación Arzobispo Miguel Roca Proyecto Hombre de Valencia. Con el objetivo de la adquisición del equilibrio emocional mediante el aprendizaje de la gestión y regulación de las emociones. La muestra fue de 27 participantes voluntarios, distribuidos en dos grupos: tratamiento (n = 21) y control (n = 6), de los que se comprobó la problemática en la persistencia de su inestabilidad emocional. Todos ellos se encontraban afectados a nivel personal (salud física y mental), laboral (pérdida de empleo o imposibilidad de obtener alguno), familiar y social (aislados). Además, de una disminución en el reconocimiento y regulación de las emociones. Posteriormente, se confirmó que esta afectación impedía lograr el equilibrio que ellos necesitaban.

La intervención, se realizó mediante un tratamiento de siete sesiones del programa “TECI” (Tratamiento Emocional Conciso Integral) a nivel grupal. A continuación se expone algunas de las importantes conclusiones de dicho estudio:

  • Desbloqueo y hallazgo de respuestas y soluciones en el afrontamiento de sus problemas, puesto que la falta de mantenimiento de la abstinencia les hace persistir en su inestabilidad.

  • Cohesión de grupo, comunicación y compartir experiencias. A través de la psicoterapia grupal, con enfoque emocional-cognitivo-conductual, donde se establecieron los cambios.

  • Percepción de un estado de salud mental más bajo que físico. La carencia de autopercepción de la patología mental, puede influir en la adherencia al tratamiento y derivar en una rehabilitación más costosa.

  • Los resultados de regulación emocional, fueron significativas en el grupo tratamiento. Las dimensiones de “atención” y control” señalaron la capacidad de  comprender y gestionar emociones, junto al afrontamiento adecuado de las experiencias negativas.

  • Mejoría en las relaciones, personales, familiares y sociales. Puesto que el consumo de sustancias y alteración mental, influyen en el comportamiento y la percepción emocional.

  • Reducción notable de las patologías, incluso casi desaparecieron. Los participantes se hallaban con dos o más trastornos que afectaban a su personalidad (evitativo, esquizotípico, paranoide, pensamiento psicótico, histriónico, narcisista, etc…) y habían consumido dos o más sustancias estupefacientes (alcohol, cocaína, cannabis, etc…). Obtuvieron alta terapéutica, se mantuvieron en abstinencia (seis meses) y lograron sus objetivos a corto plazo.

Sin embargo, al ser un estudio pionero, es considerable su replicación a otras muestras de pacientes y en otros ambientes para refutar su utilidad. Otro aspecto relevante, sería la sugerencia de que los profesionales contemplaran la intervención breve, de forma preliminar al tratamiento terapéutico a largo plazo. Siendo, su efectividad valorable en términos de costes y beneficios y de esta forma optimizar el éxito terapéutico.

El estudio planteado en esta exposición, se encuentra disponible a través del siguiente enlace:

García-Pardo, A. (2018). El desarrollo de la estabilidad emocional en patología dual: una propuesta de intervención breve. Clínica y Salud, 29, 133-137.

Araceli García-Pardo. Psicóloga con estudios de doctorado; especializada con masters: en Investigación de Psicología; Clínica y Salud; Infantil y Técnico Superior de Riesgos Laborales. Participación en ponencias de  Congresos Nacionales e Internacionales de Patología Dual;  Psicología del Trabajo y RRH; Psicología y Educación. Con actividad profesional PGS en tratamiento Intervención Breve

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.