El estudio de la inteligencia es uno de los temas que más interés ha despertado entre los psicólogos, y fue uno de los motivos por los que la psicología comenzó a hacerse popular. A pesar de que en la actualidad el término inteligencia es una palabra que se emplea con normalidad, esto no era así hace poco más de un siglo.
El concepto es demasiado abstracto y, en general, ha provocado grandes debates entre los distintos expertos. Se podría decir que la inteligencia es la capacidad de elegir, entre varias posibilidades, aquella opción más acertada para la resolución de un problema o para una mejor adaptación a una situación. Para ello, el individuo inteligente toma decisiones, reflexiona, examina, deduce, revisa, acumula información y responde según la lógica.
Existen distintos tipos de inteligencia y lo mismo ocurre con los tests de inteligencia. Algunos miden lo que se conoce como “Factor G”(inteligencia en general) y otros miden distintos tipos de inteligencia, como la inteligencia lógico-matemática, inteligencia espacial, inteligencia lingüística entre otras.
Desde que empezó a estudiarse la inteligencia, varias teorías han intentado explicarla: como por ejemplo la inteligencia cristalizada y fluida de Raymond Cattell, la teoría bifactorial de Spearman, las inteligencias múltiples de Howard Gardner, por nombrar solo algunas de los más reconocidas.
Fuente: psicologiaymente.net