La supervisión de los padres disuade el consumo de sustancias en los adolescentes

La supervisión de los padres disuade el consumo de sustancias en los adolescentes

Es menos probable que los adolescentes beban, fumen o consuman drogas cuando sus padres realizan un seguimiento de sus actividades. Un nuevo estudio publicado en el Journal of Studies on Alcohol and Drugs revela que esto no se debe necesariamente a que los niños tengan más probabilidades de ser castigados por el consumo de sustancias. En cambio, la mera conciencia de que sus padres están controlando su comportamiento les disuade de probar el alcohol o las drogas.

Estudios anteriores han establecido un vínculo entre un mayor conocimiento de los padres sobre el paradero de los adolescentes y tasas más bajas de uso de sustancias. Sin embargo, las razones exactas de esta asociación no estaban claras. En su nuevo estudio, los investigadores buscaron investigar si el monitoreo de los padres funciona aumentando la probabilidad de castigo por el uso de sustancias o disuadiendo el uso a través de la percepción de que los padres podrían descubrirlo.

El estudio utilizó datos del Estudio del Cerebro y Desarrollo Cognitivo de los Adolescentes (ABCD), un gran proyecto de investigación en curso que sigue a una cohorte diversa de adolescentes en todo Estados Unidos. Para esta investigación específica, los investigadores se centraron en las respuestas de una encuesta de 4503 adolescentes de 11 a 15 años, recopiladas en mayo de 2021.

Se invitó a los participantes a completar una encuesta basada en la web, en la que se les preguntaba sobre su consumo de sustancias durante los últimos 30 días, incluido alcohol, nicotina, cannabis, medicamentos recetados, inhalantes y otras sustancias. Los adolescentes también informaron si sus padres sabían sobre su uso de sustancias y si hubo casos en los que se abstuvieron de consumir sustancias porque sus padres podrían descubrirlo.

Para medir el seguimiento de los padres, los adolescentes completaron el Cuestionario de Seguimiento de los Padres (PMQ). Este cuestionario evaluó la frecuencia con la que los padres conocían el paradero de los adolescentes, la facilidad con la que los adolescentes podían contactar a sus padres cuando estaban solos en casa, el alcance de las discusiones sobre los planes diarios y la frecuencia de las cenas familiares.

Los resultados de la encuesta revelaron que solo el 3,6% de los adolescentes había consumido sustancias en los últimos 30 días, y que la prevalencia del consumo de sustancias aumentaba con la edad: del 0,2% entre los jóvenes de 11 años al 8,6% entre los de 15 años. El alcohol, la nicotina y el cannabis fueron las sustancias más frecuentemente reportadas. Cabe destacar que solo el 31% de los adolescentes que consumieron sustancias indicaron que sus padres estaban al tanto de su consumo.

Los investigadores probaron dos hipótesis para comprender cómo la supervisión de los padres influye en el uso de sustancias en los adolescentes. La primera hipótesis, la del castigo creciente, sugería que los padres que monitorean más serían más propensos a detectar y castigar a sus hijos por el uso de sustancias. Sin embargo, el estudio no encontró ningún vínculo significativo entre el seguimiento de los padres y el conocimiento de los padres sobre el uso de sustancias, lo que indica que el seguimiento no aumentó la probabilidad de castigo.

La segunda hipótesis, la Hipótesis de Prevención/Evitación Directa, propuso que el seguimiento disuade el consumo de sustancias porque los adolescentes creen que sus padres se enterarán y los castigarán. Esta hipótesis fue respaldada por los hallazgos. Esta percepción de ser monitoreado fue efectiva para reducir el uso de sustancias, independientemente de si los padres realmente pillaron a sus hijos adolescentes en el acto.

Comprender estos mecanismos puede ayudar a brindar consejos más específicos a los padres sobre cómo reducir eficazmente el riesgo de consumo de sustancias. Como señaló el investigador principal, William Pelham, “algunos padres piensan que beber o consumir drogas es algo que los niños simplemente van a hacer, pase lo que pase. Pero eso no es cierto. Los padres pueden marcar la diferencia”.

Fuente: Journal of Studies on Alcohol and Drugs

Articulo original:  Titulo: “How Does Parental Monitoring Reduce Adolescent Substance Use? Preliminary Tests of Two Potential Mechanisms”. Autores: William E. Pelham III, Susan F. Tapert, Marybel R. Gonzalez, Uzoma Ahiarakwe, Herry Patel, Isabella S. Davis, Alejandro D. Meruelo, Amandine M. Van Rinsveld, Andrew T. Marshall, Anthony Steven Dick, Mathieu Guillaume, Gayathri J. Dowling, Arielle Baskin-Sommers y Sandra A. Brown.

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