El papel oculto de las horas dormidas sobre cómo vivimos los sucesos del día

La pauta recomendada para una buena noche de sueño es dormir al menos siete horas, pero bastante gente duerme habitualmente menos horas. Muchos estudios indican que dormir menos de lo necesario aumenta el riesgo de sufrir trastornos mentales, problemas de salud crónicos e incluso muerte prematura. Una nueva investigación, realizada sobre casi dos mil personas, ha sacado ahora a la luz una influencia inesperada de la cantidad de horas de sueño sobre cómo nos sentimos luego al vivir cada uno de los diferentes tipos de sucesos del día.

En pocas palabras, lo descubierto en el nuevo estudio, a cargo del equipo de Nancy Sin de la Universidad de la Columbia Británica en Canadá, indica que después de una noche en la que se ha dormido menos de lo necesario, la persona experimenta emociones más intensas ante los sucesos estresantes del día siguiente y disfruta menos de las cosas buenas, en comparación con cómo habría vivido todas esas experiencias si hubiese dormido lo suficiente.

«Cuando la gente experimenta algo positivo, como recibir un abrazo o estar un rato en contacto con la naturaleza, normalmente se siente más feliz ese día», explica con ejemplos Sin. «Pero descubrimos que cuando una persona duerme menos de lo habitual, no experimenta con tanta fuerza las emociones positivas despertadas por los acontecimientos gratos”.

Cuando los sujetos de estudio dormían menos de lo habitual y se enfrentaban a experiencias estresantes, como por ejemplo discusiones en el trabajo, en casa y en la calle, o sucesos por el estilo, aquel día en su balance de emociones las negativas se reforzaban y las positivas se debilitaban, en comparación con situaciones similares pero habiendo dormido lo suficiente la noche anterior.

Haber dormido lo suficiente ayuda a soportar mejor los sucesos negativos y a disfrutar más los positivos, según los resultados del nuevo estudio. (Foto: Amazings / NCYT)

Esto puede tener importantes repercusiones en la salud: investigaciones anteriores de Sin y otros muestran que la merma de emociones positivas por culpa del estrés pone a las personas en un mayor riesgo de sufrir inflamación e incluso de morir prematuramente. (Fuente: NCYT de Amazings)