¿Alguien llamado Dennis tendría más probabilidades de ser dentista y vivir en Denver? Un nuevo estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology sugiere que sí.
El determinismo nominativo es la idea de que las personas se sienten atraídas por profesiones o lugares que comparten la misma letra inicial que su nombre, basándose en el concepto de egoísmo implícito, que postula que las personas se sienten atraídas naturalmente por cosas que se parecen a ellas. Al analizar corpus de texto de Common Crawl, Twitter, Google News y Google Books, Promothesh Chatterjee y sus colegas probaron si esta tendencia pudiera influir en decisiones importantes de la vida, como las trayectorias profesionales y la elección de ciudades.
Los investigadores utilizaron incrustaciones de palabras previamente entrenadas de grandes conjuntos de datos de texto para medir la similitud del coseno entre vectores que representan nombres y profesiones o nombres de ciudades. Se centraron en los nombres, argumentando que son más centrales para la identidad personal que los apellidos, que pueden cambiar a lo largo de la vida. Los conjuntos de datos incluyeron 3.410 nombres de la Administración de la Seguridad Social de EE. UU., que aparecieron de manera constante en todos los años entre 2011 y 2020. Los nombres se compararon con datos étnicos de Tzioumis ( 2018 ). Se extrajeron y filtraron profesiones y ciudades para incluir solo entradas de una sola palabra (por ejemplo, “doctor”, “Chicago”).
Los investigadores controlaron varios factores, incluido el género, el origen étnico y la frecuencia de nombres y profesiones, para aislar el efecto del determinismo nominativo.
El equipo de investigadores encontró un efecto consistente del determinismo nominativo en todos los conjuntos de datos. Los nombres con una alta similitud coseno con ciertas profesiones (por ejemplo, Dennis y dentista, Dennis y Denver) eran más comunes de lo que se esperaría por casualidad. Este patrón también se aplica a la elección de ciudades, donde era más probable que los nombres estuvieran asociados con ciudades que compartían la misma letra inicial. Los hallazgos fueron consistentes a lo largo de décadas, lo que demuestra que el efecto del determinismo nominativo ha sido un fenómeno estable a lo largo del siglo XX.
Curiosamente, los investigadores observaron una interacción Década por Género en el efecto del determinismo nominativo para las profesiones. Los hombres exhibieron un efecto de determinismo nominativo más fuerte a principios del siglo XX, pero esta diferencia disminuyó con el tiempo a medida que las mujeres obtuvieron más opciones profesionales. Este cambio sugiere que a medida que las normas sociales evolucionaron, permitiendo a las mujeres más libertad en la selección de carreras, sus nombres jugaron un papel más importante en sus identidades profesionales.
El mayor acceso a la educación superior redujo el efecto de las iniciales del nombre en las elecciones de carrera, lo que sugiere que quienes tienen educación superior están menos influenciados por el determinismo nominativo, tal vez porque su educación proporciona un marcador de identidad más fuerte que su nombre.
Una limitación señalada por los autores es la naturaleza transversal de los datos. Si bien los conjuntos de datos proporcionaron una instantánea del determinismo nominativo, no capturan los cambios longitudinales dentro de la esperanza de vida de los individuos.
Fuente: Journal of Personality and Social Psychology
Articulo original: Titulo: “Does the first letter of one’s name affect life decisions? A natural language processing examination of nominative determinism”. Autores: Promothesh Chatterjee, Himanshu Mishra y Arul Mishra.