Dado que el virus COVID-19 se ha extendido por todo el mundo, sin duda se ha encontrado en sus tiendas locales que se han agotado los artículos esenciales, como papel higiénico, desinfectante para manos y muchos productos alimenticios.
Los chistes y los memes llenan Internet burlándose de la forma en que las personas están arrasando las tiendas de comestibles, especialmente de productos no necesariamente relacionados con este virus específico, como el papel higiénico. ¿Que está pasando aquí?
Hay algunas investigaciones sobre por qué las personas compran más en una crisis, y sugerencias sobre los pasos que las tiendas pueden tomar para reducir este problema.
Uno de los artículos más completos fue publicado en la revista Manufacturing and Service Operations Management. En él, los investigadores desarrollan modelos económicos para explicar por qué los consumidores realizan compras de pánico y qué deben hacer las tiendas al respecto.
No es sorprendente que los investigadores descubran que las personas almacenarán un producto para consumo futuro si creen que el precio aumentara o si se sienten inseguros de poder obtener el producto en el futuro. En nuestra situación actual, los consumidores están claramente preocupados de que las interrupciones económicas causadas por el virus COVID-19 dificulten la compra de alimentos básicos en el futuro cercano.
El artículo también demuestra que es importante que las tiendas respondan al comportamiento del consumidor. En el caso de que los consumidores acumulen para evitar riesgos en el futuro, instituir cuotas de compra para artículos de alta demanda es una forma efectiva de administrar los recursos.
Un segundo artículo similar en la revista Management Science, las cuotas de compra son más importantes cuando la tienda no puede satisfacer la demanda de los consumidores.
Finalmente, un tercer trabajo en el Journal of Intelligence investigó un caso específico de compra de velas por pánico en China en 2012 debido a un rumor de que la tierra caería en la oscuridad durante tres días cuando el calendario maya llegara a su fin.
El estudio analizó detenidamente cómo la difusión de información compleja influyó en los patrones de compra de los consumidores. Los investigadores encontraron que la compra de pánico progresa en etapas según la información compartida por individuos clave, y que las figuras públicas y gubernamentales pueden influir en los patrones de compra al compartir información objetiva.
Como conclusión podemos decir que la evidencia muestra que la compra de pánico en situaciones de desastre se debe principalmente al temor de que haya una escasez en el futuro. Si hay una verdadera escasez de un artículo, es una buena práctica que las tiendas establezcan cuotas de compra. También deben comunicarse claramente cuando hay muchos recursos disponibles. Estos son pasos esenciales para calmar las compras de pánico.
Fuente: Psychology Today