El Talmud cuenta la historia de Elías el Profeta quien se encontraba en un mercado. Un rabino le pregunta: «¿Alguna de estas personas está destinada al Mundo Venidero?» Elías señala a dos hermanos. El rabino, curioso por saber qué tienen de especial estos hombres, corre hacia ellos y les pregunta cuál es su ocupación. “Somos unos bufones”, responden. “Hacemos reír a la gente triste. Y cuando vemos a dos personas en una pelea, usamos algo de humor para hacer las paces entre ellos”.
El mundo puede ser un lugar difícil y doloroso, especialmente para las personas que están enfermas y en el hospital. Los payasos médicos han trabajado en hospitales israelíes durante muchos años, donde son reconocidos por el impacto positivo que tienen en lo que puede ser una experiencia hospitalaria sombría e intimidante. Sin embargo, también ha habido objeciones a su uso, por parte de quienes las ven como complementos frívolos, disruptivos para el trabajo serio de los hospitales.
Usando múltiples métodos cualitativos, los investigadores israelíes de la Universidad de Tel Aviv y el Centro de Simulación Médica de Israel demostraron que la contribución de los payasos médicos va mucho más allá de crear un buen estado de ánimo.
Los payasos médicos, o «médicos de los sueños», son personas con formación profesional en artes escénicas, seguidas de cinco meses o más de formación específica. Cientos de payasos médicos trabajan en docenas de hospitales y otras instituciones en todo Israel. En este estudio, los investigadores identificaron 40 habilidades diferentes del payaso médico, que van desde establecer una relación con el paciente, distraerlo del dolor y los procedimientos desagradables, hasta aumentar la motivación del paciente para cumplir con su régimen médico.
Al igual que los bufones del mercado, los payasos médicos levantan el ánimo de las personas infelices, no solo de los pacientes, sino también de sus familias y del equipo médico, y reducen los conflictos entre todos los miembros del equipo de tratamiento. Si bien una sola persona ocupa la cama del hospital, la curación es un proceso que se lleva a cabo en un contexto interdependiente, con una dinámica que incluye a la familia del paciente, al personal del hospital y a los amigos. El payaso médico puede, por ejemplo, atraer la frustración del paciente hacia él, cuando de otro modo se habría dirigido con ira hacia sus padres o médicos (ya estresados y angustiados).
Empoderando al paciente
En el mundo hospitalario jerárquico, el paciente, especialmente el paciente que también es un niño, está en lo más bajo. El payaso médico empodera inmediatamente al paciente colocándose en la posición más baja. Incluso el paciente más joven y enfermo tiene control sobre si el payaso médico puede entrar en su habitación. El paciente puede poner límites a la relación. El humor ayuda a establecer rápidamente una conexión emocional, que un payaso médico hábil puede usar para convertir los procedimientos en juegos.
Al presentar la risa y las tonterías, la música y el juego, el payaso médico es una figura transformadora que reduce el miedo y el sufrimiento, al mismo tiempo que promueve la esperanza y la curación.
Referencia:
Orit Karnieli-Miller, Orna Divon-Ophir, Doron Sagi, Liat Pessach-Geltblum, Amital Ziv, and Lior Rozental, More Than Just an Entertainment Show: Identification of Medical Clowns’ Communication Skills and Therapeutic Goals, Qualitative Health Research, 33, Issue 1-2, January 2023, pp. 25-38