La ansiedad en los EE. UU. va en aumento, especialmente sobre las finanzas.
En el último año, la ansiedad entre los estadounidenses se ha incrementado sustancialmente, particularmente en torno a la cuestión del pago de facturas, según una encuesta nacional publicada recientemente por la Asociación Americana de Psiquiatría (APA).
En una escala de 1 a 100, el puntaje de ansiedad nacional total de este año es 51, un aumento de cinco puntos desde 2017. Se observaron puntajes de ansiedad más altos en varios grupos de edad, en personas de diferentes razas y etnias así como entre hombres y mujeres.
Los encuestados calificaron sus niveles de ansiedad en cinco áreas diferentes de la vida: salud, seguridad, finanzas, relaciones y política. Si bien la encuesta muestra que más estadounidenses están experimentando una mayor ansiedad en las cinco áreas (salud, seguridad, finanzas, relaciones y política) que el año pasado, el mayor aumento de ansiedad fue sobre el pago de facturas. Casi el 75 por ciento de las mujeres, casi el 75 por ciento de los adultos jóvenes (18 – 34) y casi el 80 por ciento de los adultos hispanos están algo o extremadamente ansiosos por pagar sus cuentas.
Por generación, los Millennials continuaron siendo más ansiosos que los Gen Xers o Baby Boomers; sin embargo, la ansiedad entre los Baby Boomers mostró el mayor aumento con un salto de siete puntos entre 2017 y 2018.
En general, las mujeres son más ansiosas que los hombres, y también tuvieron un mayor aumento de la ansiedad que los hombres entre 2017 y 2018. Cuando se les pidió que compararan su ansiedad con el año anterior, más de la mitad (57 por ciento) de las mujeres de 18-49 años señalaron estar más ansiosas, en comparación con el 38 por ciento de los hombres de la misma edad.
Las generaciones mayores también ven esta diferencia de género: el 39 por ciento de las mujeres de 50 años o más y el 24 por ciento de los hombres de 50 años o más dicen estar más ansiosos ahora que el año pasado. En general, casi cuatro de cada 10 personas (39 por ciento) dicen que están más ansiosos que el año pasado.
Otros hallazgos de la encuesta: las personas de color son más ansiosas que las caucásicas (11 puntos más altas en el índice de ansiedad); Los estadounidenses expresaron preocupaciones casi iguales sobre la salud, la seguridad y el pago de facturas, con algo menos de preocupación sobre la política y las relaciones; las personas con Medicaid están más ansiosas que las personas con seguro privado.
«Esta encuesta muestra que los adultos de EE. UU. están cada vez más ansiosos, sobre todo en lo que respecta a la salud, la seguridad y las finanzas. Ese aumento del estrés y la ansiedad puede tener un impacto significativo en muchos aspectos de la vida de las personas, incluida su salud mental, y puede afectar a las familias «, dijo Anita Everett la presidenta de APA.
«Destaca la necesidad de ayudar a reducir los efectos del estrés con ejercicio regular, relajación, alimentación saludable y tiempo con amigos así como con familiares».
La encuesta también preguntó a los participantes sobre sus actitudes y percepciones sobre la salud mental y el tratamiento. Los resultados muestran que una gran mayoría de los estadounidenses cree que la salud mental de una persona afecta su salud física (86 por ciento, frente al 80 por ciento en 2017).
Además, el 75 por ciento de los estadounidenses dice que las enfermedades mentales no tratadas tienen un impacto significativo en la economía de EE. UU. Alrededor de la mitad dicen que hay menos estigma contra las personas con enfermedades mentales que hace 10 años. Sin embargo, más de un tercio dice que no votaría por un candidato para un cargo público que haya sido diagnosticado con una enfermedad mental, incluso si el candidato recibió tratamiento.
Fuente: Asociación Americana de Psiquiatría