Las relaciones felices se caracterizan por el deseo de cada uno de satisfacer las necesidades del otro

¿Son todas las expresiones de agradecimiento igualmente efectivas para hacer feliz a nuestra pareja por el sacrificio que hicieron? Esta es la pregunta que el psicólogo de la Universidad de Toronto Yoobin Park y sus colegas exploraron en un artículo que publicaron recientemente en el Journal of Social and Personal Relationships.

Park y sus colegas señalan que las expresiones de gratitud suelen adoptar una de dos formas. Una forma de decir gracias es reconociendo el costo incurrido por nuestro benefactor.

La otra forma en que expresamos nuestra gratitud es señalando cuán receptivo fue nuestra pareja a nuestras necesidades.

¿Qué enfoque hará que la benefactora se sienta mejor acerca del sacrificio que hizo?

Park y sus colegas también reflexionaron sobre esta pregunta, y razonaron de la siguiente manera: por un lado, si le agradece a su pareja el costo en él o ella que incurrió, les recuerda que ahora hay un desequilibrio en la relación y esto conduce a un sentimiento incómodo. Por otro lado, si expresa gratitud por su capacidad de respuesta a sus necesidades, le hará saber que ha hecho una buena acción, lo que mejorará su estado de ánimo.

Para probar la hipótesis de que resaltar la capacidad de respuesta al expresar gratitud conduciría a un mayor aumento en el estado de ánimo del benefactor en comparación con resaltar el costo, los investigadores invitaron a casi un centenar de parejas a participar en un estudio diario de dos semanas. Cada noche durante 14 días, cada pareja respondió por separado a una breve encuesta que recibió en su teléfono inteligente. Si informaron que su pareja había expresado su gratitud por hacer un sacrificio ese día, respondieron a las preguntas de seguimiento sobre ese evento.

En primer lugar, se preguntó a los encuestados cómo percibían la expresión de gratitud. En particular, los investigadores están abordando la cuestión de si su pareja había reconocido su capacidad de respuesta o el costo en el que incurrieron.

A continuación, indicaron su reacción a la expresión de gratitud de su pareja. En particular, los investigadores evaluaron el grado en que los encuestados experimentaron sentimientos positivos o negativos después de haber sido agradecidos por su pareja.

Después de eso, los encuestados indicaron su nivel general de satisfacción con la relación. También informaron sobre lo positivo que fue su estado de ánimo ese día.

Finalmente, respondieron a la pregunta: «¿Qué tan costoso fue este compromiso/sacrificio para usted?» Indicaron el costo percibido en una escala de siete puntos que van desde «nada» a «mucho».

En general, los resultados apoyaron la hipótesis. En ocasiones, cuando los encuestados informaron que su pareja les había agradecido por su capacidad de respuesta, informaron un estado de ánimo más positivo que cuando se les agradeció el costo en el que habían incurrido.

Park y sus colegas relacionaron estos hallazgos con lo que ya se sabe sobre la dinámica de las relaciones románticas. Específicamente, la investigación ha demostrado consistentemente que las relaciones basadas en un intercambio de favores (“Te rascaré la espalda si tú rascas la mía”) son menos satisfactorias que aquellas basadas en la capacidad de respuesta a las necesidades de los demás (“Déjame darte un masaje en la espalda; parece que lo necesitas”).

Cuando expresamos nuestra gratitud reconociendo el costo del sacrificio, nos ponemos tanto a nosotros mismos como a nuestra pareja en un «modo de intercambio» de pensar en la relación. Esto enfatiza el hecho de que el benefactor ha perdido algo mientras que el beneficiario ha ganado algo, resaltando así la sensación de que la relación ahora está desequilibrada.

Por el contrario, agradecer a nuestros socios por su capacidad de respuesta a nuestras necesidades resalta la naturaleza comunitaria de la relación romántica. Las relaciones felices se caracterizan por el deseo de cada uno de satisfacer las necesidades del otro, confiando en que harán lo mismo cuando sea necesario. Agradecer a nuestros socios por satisfacer nuestras necesidades reconoce que han hecho una buena acción y, como resultado, su estado de ánimo mejora.

Si este mismo patrón de resultados se encontraría en expresiones de gratitud entre amigos o familiares es una cuestión que aguarda otro proyecto de investigación. Sin embargo, si el razonamiento inicial de Park y sus colegas es correcto, podemos esperar que los resultados sean similares.

Los datos de este estudio apoyan la idea de que las expresiones de gratitud que destacan los costos pueden llevar a los benefactores a sentir un desequilibrio en las relaciones. Por el contrario, cuando destacamos la capacidad de respuesta de nuestra pareja a nuestras necesidades, mejoramos su estado de ánimo. Y eso en sí mismo tendrá un impacto positivo en nuestra relación como un todo.

Fuente: Psychology Today

Referencia:

Park, Y., Visserman, M. L., Sisson, N. M., Le, B. M., Stellar, J. E., & Impett, E. A. (2020). How can I thank you? Highlighting the benefactor’s responsiveness or costs when expressing gratitude. Journal of Social and Personal Relationships. Advance online publication. DOI: 10.1177/0265407520966049

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