La pandemia de COVID-19 generó un conjunto único de desafíos que afectaron no solo nuestra salud física sino también nuestro bienestar mental. Un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de York ha puesto de relieve una consecuencia particularmente intrigante: el sentimiento de desorientación social y temporal. Según el estudio, publicado en el British Journal of Psychology, muchas personas se sintieron confundidas acerca de la secuencia de los acontecimientos y tuvieron dificultades para recordar qué día era durante la pandemia.
A medida que la pandemia se extendió por todo el mundo, trastornó las rutinas diarias y las interacciones sociales a una escala sin precedentes. Los investigadores intentaron comprender el impacto psicológico de estas perturbaciones, centrándose específicamente en los sentimientos de desorientación. El concepto de desorientación incluye tanto la desorientación social (sentirse fuera de lugar en situaciones sociales) como la desorientación temporal (confusión sobre el paso del tiempo).
Dados los cambios significativos en el estilo de vida y las interacciones sociales durante la pandemia, comprender estos fenómenos podría proporcionar información sobre cómo apoyar mejor la salud mental durante las crisis.
Para investigar los efectos psicológicos de la pandemia, los investigadores desarrollaron un cuestionario detallado. Encuestaron a más de 3.300 participantes en Francia durante un período de estrictos cierres y toques de queda. El cuestionario incluía casi 60 preguntas diseñadas para medir la desorientación social y temporal. Se preguntó a los participantes sobre sus interacciones sociales, sus sentimientos de soledad y su sentido del tiempo antes y durante la pandemia.
La encuesta recopiló información demográfica, incluida la edad, el sexo y la ocupación. También incluyó preguntas del Global Psychotrauma Screening para evaluar el impacto psicológico más amplio de la pandemia. Los investigadores se propusieron explorar la relación entre la desorientación social y la desorientación temporal, con la hipótesis de que el aislamiento social podría provocar alteraciones en la experiencia del tiempo.
El estudio reveló que la desorientación tanto social como temporal fue común durante la pandemia. Muchos participantes describieron sentirse inseguros de cómo comportarse en situaciones sociales y experimentar una confusión del tiempo. Les costaba llevar la cuenta de los días y se sentían más ansiosos por el futuro.
Uno de los hallazgos clave fue el vínculo entre el aislamiento social y la desorientación temporal. Los participantes que se sentían más aislados socialmente también tenían más probabilidades de experimentar confusión sobre el tiempo. Esto sugiere que sentirnos desconectados de los demás puede distorsionar nuestra percepción del tiempo, haciendo que sea más difícil recordar eventos pasados y planificar el futuro.
Pablo Fernández Velasco, autor principal del estudio, explicó: “Encontramos que la desorientación social era un fuerte predictor de la desorientación temporal y parece probable que existiera una relación causal entre las dos. Sentirse solo y aislado de los demás parece deformar nuestra percepción del tiempo, con una sensación de pérdida y confusión que abarca el pasado, el presente y el futuro”.
El estudio también identificó grupos demográficos específicos que se vieron más afectados por la desorientación. Los jóvenes menores de 25 años reportaron los niveles más altos de desorientación social y temporal. Este grupo de edad fue el que más luchó con los impactos psicológicos de la pandemia, posiblemente debido a la interrupción de su vida social y rutinas educativas.
Si bien el estudio proporciona información valiosa, también tiene limitaciones. La encuesta se realizó durante un período específico de la pandemia en Francia y es posible que los hallazgos no sean generalizables a otras regiones o épocas. Además, el estudio se basó en datos autoinformados, que pueden estar sujetos a sesgos.
Investigaciones futuras podrían abordar estas limitaciones mediante la realización de estudios longitudinales que rastreen los cambios en la desorientación a lo largo del tiempo y en diferentes regiones. También sería beneficioso explorar intervenciones que pudieran mitigar los efectos del aislamiento social en la percepción temporal. Por ejemplo, promover interacciones sociales virtuales o programas de apoyo comunitario podría ayudar a reducir los sentimientos de soledad y mejorar el sentido del tiempo de las personas.
Además, el concepto de “ruptura temporal”, introducido por los investigadores, merece una mayor investigación. Este término describe la sensación de brecha que separa el tiempo antes y después de la pandemia, que experimentaron muchos participantes. Comprender este fenómeno podría proporcionar conocimientos más profundos sobre cómo las crisis importantes afectan nuestra percepción del tiempo y nuestra salud mental.
“Cuanto mayor era la brecha experimentada entre la época prepandémica y la pandémica, más desorientada se sentía la gente”, dijo Velasco. «Los relatos personales recopilados en nuestro estudio ayudan a avanzar en la comprensión de los posibles impactos de los sentimientos de soledad y aislamiento a través de las extraordinarias experiencias de la pandemia».
Fuente: British Journal of Psychology
Articulo original: Titulo: “Social and temporal disorientation during the Covid-19 pandemic: An analysis of 3306 responses to a quantitative questionnaire”. Autores: Pablo Fernandez Velasco, Bastien Perroy, Umer Gurchani y Roberto Casati.