Ser olvidado puede afectar la autoestima de la misma manera que ser rechazado.
Los psicólogos de la Universidad de Aberdeen que investigan la experiencia del olvido han descubierto que los lapsos de memoria pueden dañar las relaciones.
La investigación financiada por el Consejo de Investigación Económica y Social exploró cómo, por qué y con qué frecuencia se olvida a las personas en la vida cotidiana, y consideró el impacto que el olvido puede tener en las relaciones de las personas involucradas.
El Dr. Devin Ray, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Aberdeen, explicó su investigación: «Los científicos han estado estudiando lo que recordamos y olvidamos durante décadas, pero nadie habia preguntado por qué es importante si alguien recuerda u olvida a otra persona.
«Eso parece especialmente sorprendente ya que todos tienen experiencias con el olvido de otras personas y la mayoría de la gente parece estar de acuerdo en que la experiencia es importante. Ya era hora de que alguien estudiara detenidamente la experiencia para poder contarles a los científicos y a todos los demás cómo es esta experiencia para la mayoría de la gente y si realmente importa».
Los principales hallazgos de la investigación incluyen:
- Ser olvidado es una experiencia relativamente común.
- Más comúnmente, las personas olvidan detalles personales o interacciones pasadas.
- La experiencia de ser olvidado tiene un impacto, sin importar lo cerca que esté la relación.
- Ser olvidado afecta la cercanía de las relaciones porque la persona olvidada infiere que son menos importantes.
- La gente prefiere poner excusas para otras personas que se olvidan (por ejemplo, estaba distraída frente a lo que no estaba interesada) y esas excusas ayudan a reducir, pero no eliminan por completo, el impacto personal de ser olvidado.
- Ser olvidado puede, en menor medida, afectar la autoestima de la misma manera que el ostracismo o el rechazo.
El Dr. Ray dice que el equipo de investigación ahora espera hacer un seguimiento de este hallazgo y trabajar más en estrategias conversacionales que las personas puedan usar para mitigar el impacto del olvido, incluida la efectividad de las exusas. «¿Deberíamos pretender fingir que recordamos más de lo que creemos? ¿O deberías admitir que tenemos mala memoria y disculparnos?»
El Dr. Ray espera que la investigación les brinde a las personas un poco más de información sobre sus vidas diarias. «Cuando las personas descubren que han olvidado algo que sienten que deberían haber recordado, hay buenas y malas noticias. La buena noticia es que este tipo de cosas suceden todo el tiempo, otras personas lo entienden y no le darán importancia. La mala noticia es que, a pesar de lo común que es este tipo de olvido, y a pesar de lo comprensivo que tiende a ser la gente, hay un impacto negativo medible».
Esta investigación fue publicada en el Journal of Personality and Social Psychology.
Fuente: medicalxpress.com