Las leyes sobre el cannabis recreativo están asociadas con un aumento del 20% en los incidentes de violencia de pareja, según se publicó en Economics & Human Biology.
El cannabis ha estado en el centro de los debates sobre políticas públicas, especialmente después de que varios estados de los EE. UU. comenzaran a legalizar su uso con fines recreativos. Los defensores de estas leyes suelen citar posibles beneficios, como la reducción del uso de opioides y la disminución de las tasas de criminalidad. Sin embargo, los efectos del consumo de cannabis no están exentos de controversia, ya que algunas investigaciones sugieren que puede tener efectos perjudiciales para la salud mental, lo que podría provocar un aumento de la paranoia, la agresión y el comportamiento violento.
Michele Baggio y sus colegas exploraron esta posible conexión entre la legalización del cannabis recreativo y la violencia de pareja, considerando la creciente aceptación del cannabis como una sustancia relativamente inofensiva.
La violencia de pareja es un problema de salud pública importante que afecta a millones de personas cada año, por lo que es fundamental comprender las consecuencias más amplias de los cambios de políticas, como la legalización del cannabis. Los investigadores examinaron cómo la legalización del cannabis para uso recreativo afecta las tasas de violencia de pareja en los estados de EE. UU. durante un período de 10 años.
El equipo de investigación utilizó un enfoque de diferencias y analizó datos de 2006 a 2016 en 39 estados de EE. UU. Este método les permitió comparar los cambios en las tasas de violencia de pareja antes y después de la implementación de leyes sobre el cannabis recreativo en los estados que las promulgaron con los que no lo hicieron. El conjunto de datos principal se extrajo del Sistema Nacional de Informes Basados en Incidentes (NIBRS), que registra información detallada sobre incidentes delictivos, incluida la relación víctima-agresor, esencial para identificar casos de violencia de pareja.
Los investigadores incluyeron multiples variables de control para tener en cuenta las diferencias entre los estados, como factores demográficos, condiciones económicas a nivel estatal y otras leyes relevantes (por ejemplo, leyes sobre cannabis medicinal). La muestra final del estudio comprendió datos de 1.611 condados a lo largo de 132 meses. El resultado principal de interés fue la cantidad de incidentes de violencia de pareja por cada 100.000 personas, comparando las tasas de violencia de pareja antes y después de la legalización del cannabis recreativo.
Los resultados indicaron que la legalización del cannabis recreativo se asoció con un aumento significativo de las tasas de violencia de pareja. En concreto, la legalización del cannabis recreativo provocó un aumento del 20 % de los incidentes de violencia de pareja por cada 100 000 personas en los estados que promulgaron estas leyes. Este aumento fue constante en las distintas especificaciones del modelo y los resultados se mantuvieron sólidos incluso cuando se tuvieron en cuenta los factores demográficos y económicos a nivel estatal.
El estudio destacó además que la mala salud mental y el consumo excesivo de alcohol eran mediadores potenciales. Es decir, en los estados donde el consumo recreativo de cannabis estaba legalizado, las personas informaron una mayor incidencia de mala salud mental y consumo excesivo de alcohol, dos factores que contribuyen a la violencia de pareja.
Los investigadores también encontraron que el aumento en las tasas de violencia de pareja fue particularmente pronunciado entre los agresores y las víctimas blancos, y se observaron efectos menos significativos entre las parejas afroamericanas.
Una limitación del estudio es la posible falta de denuncia de los incidentes de violencia de pareja, especialmente en grupos demográficos como los afroamericanos. Esto puede haber dado lugar a estimaciones conservadoras del verdadero impacto de la legalización del cannabis recreativo en las tasas de violencia de pareja.
Los hallazgos sugieren que la legalización del cannabis recreativo puede tener consecuencias no deseadas en las tasas de violencia de pareja, lo que subraya la necesidad de políticas preventivas para abordar esta cuestión.
Fuente: Economics & Human Biology
Articulo original:
Título: “High times and troubled relationships: Recreational marijuana laws and intimate partner violence”.
Autores: Michele Baggio, Alberto Chong y Revathy Suryanarayana.