Verte a ti mismo ocupado puede reforzar tu autocontrol.
En un nuevo estudio, los investigadores de la escuela de negocios internacional INSEAD encontraron que, si bien el ajetreo se considera a menudo como una afección moderna, puede ayudar a retrasar la gratificación y proporcionar beneficios a largo plazo.
«Todos los días tomamos muchas decisiones que implican elegir entre nuestro bienestar inmediato y futuro. Por ejemplo, ¿vamos al gimnasio después del trabajo o nos vamos a casa a relajarnos frente a la televisión? ¿Ahorramos nuestro dinero para la jubilación o lo derrochamos en un viaje? ¿Comemos fruta o pastel para el postre?
«Cuando percibimos que estamos ocupados, esto aumenta nuestra autoestima, inclinando la balanza a favor de la opción más virtuosa», dijo la Dra. Amitava Chattopadhyay, profesora de mercadotecnia de INSEAD.
En el nuevo artículo Chattopadhyay y sus coautores muestran que la mera percepción de uno mismo como una persona ocupada, o lo que ellos llaman una mentalidad ocupada, es una «insignia de honor» que puede aprovecharse para promover un mejor autocontrol. Los coautores incluyen a Monica Wadhwa, profesora asociada de Marketing y Gestión de la Cadena de Suministro, en la Escuela de Negocios Fox en la Univeridad Temple y Jeehye Christine Kim, profesora asistente de Marketing en HKUST.
Los investigadores postulan que puede haber otra cara para estar ocupado. Mientras que las personas que se sienten bajo una gran presión de tiempo tienden a ponerse ansiosas y tomar decisiones hedónicas, aquellos que simplemente piensan en sí mismos como que están ocupados tienden a tomar decisiones virtuosas como resultado de su autoimportancia percibida.
En una serie de estudios, los investigadores activaron la mentalidad ocupada de los participantes a través de diversos medios. A veces los exponían a mensajes que sutilmente sugerían que eran personas ocupadas. En otros experimentos, les pidieron a los participantes que escribieran lo que los había mantenido ocupados recientemente.
Luego se les pidió a los participantes que tomaran decisiones en diferentes dominios de autocontrol relacionados con los alimentos, el ejercicio o los ahorros para la jubilación, por ejemplo. Los participantes a quienes se les recordó su estilo de vida ocupado fueron consistentemente más propensos que los participantes del control a tomar decisiones virtuosas.
Los estudios mostraron que un sentido elevado de auto importancia fue la razón clave detrás del aumento en el autocontrol.
«Cuando atenuamos temporalmente el sentido de auto importancia de los participantes que de otra manera se sentían ocupados, el efecto de autocontrol desapareció», dijo Chattopadhyay.
Las investigaciones creen que los hallazgos tienen implicaciones significativas para el marketing y la formulación de políticas. Por ejemplo, es común que los especialistas en marketing usen el espacio ocupado como concepto de campaña, ya que muchos consumidores pueden identificarse con él.
Sin embargo, si el producto publicitado es indulgente, como la comida rápida, la campaña podría ser contraproducente. «Las apelaciones de ocupación deberían ser más efectivas para los productos que requieren que las personas hagan valer su autocontrol, como sería el caso de una cadena de gimnasios, por ejemplo», comentó Chattopadhyay.
Además, estos hallazgos podrían encontrar aplicaciones sociales en las esferas de la promoción de la salud o la reducción del desperdicio de alimentos. De hecho, los diseñadores de políticas pueden querer considerar formas de activar una mentalidad ocupada como un empujón para aumentar los comportamientos de autocontrol relevantes en la población.
El artículo está disponible en el Journal of Consumer Research.
Fuente: INSEAD / EurekAlert