Aprendiendo a vivir mejor cada día.
La vida va y viene. Cada día es distinto. Experimentamos alegría y, a menudo, junto con ella, el sufrimiento humano.
Cada día puede ser significativo para nosotros. Es una oportunidad para reflexionar y contemplar, crecer y hacer cambios a medida que avanzamos. Queremos aprovechar cómo vivir nuestra «mejor vida». Una vida que sea productiva, con un propósito y que estemos viviendo plenamente mientras nos conectamos con nosotros mismos y con otras personas.
A continuación veamos 10 consejos para vivir una vida mejor:
- Evalúe a diario si estás haciendo un esfuerzo por apoyarte en tus valores fundamentales e identifica qué acción específica tomaste para llevarlo a cabo (por ejemplo, basándote en tu valor de crianza, mostraste empatía hacia tu hijo, incluso cuando estabas exasperado(a) por él o ella. Has un inventario de si te inclinaste dentro o fuera de tus valores respectivos al final de cada día.
- Nota tus juicios sobre ti y los demás. Los momentos en que arrojas tus «deberes» alrededor e insistes en que las cosas sean como tú. Has esfuerzos para ser menos rígido, y más abierto y flexible.
- Hazlo por los demás y no esperes nada a cambio. Hazlo «solo porque» es lo que quieres ser. Ya sea que tu intención sea ser considerado(a), amable o cariñoso(a).
- Tómate un momento significativo para escuchar a alguien que necesita ser escuchado sin distraerte, interrumpirle o desviarte de la conversación hablando sobre ti. Coloca tu teléfono boca abajo y/o ponlo en silencio. Cuando salgas a cenar con amigos o familiares, apágalo y retíralo físicamente.
- Reconoce cuando sientes que estás juzgando, criticando o evaluando negativamente a alguien. Vuelve a solo observarlos sin combinar tus sentimientos con negatividad y juicio. Has preguntas sobre su comportamiento, en lugar de ser acusatorio. (p. ej., en lugar de decir o pensar «no me respondió, es tan irresponsable y egoísta», considera «no me contestó. Le preguntaré y buscaré por qué»).
- Desafíate a ti mismo(a) para llegar de manera proactiva a alguien que has estado pensando o con quien estabas pensando en conectarte más y has evitado hacerlo por razones justificables o no justificables.
- Ponte en contacto con alguien que está pasando por un mal momento. Comparte con ellos que estaban en tus pensamientos.
- Si no puedes encontrar una profunda pasión y significado en el trabajo tradicional que realizas, entonces encuentra algo fuera de él que te motive, te obligue y sientas pasión hacia (como por ejemplo, voluntariado, artes creativas, etc.).
- Evalúa continuamente si tu vida terminara mañana, si te sentirías satisfecho(a) y realizado(a). Si tienea arrepentimientos o «asuntos pendientes», contempla cómo preferirías vivir el resto de su vida. Trabaja conscientemente para hacer que la vida sea más significativa para ti.
- Evalúa continuamente si tu vida terminara mañana lo que la gente recordaría y comentaría sobre ti. Pregúntate si esa es la forma en que prefieres ser recordado(a).
Si hay aspectos sobre tu actitud, personalidad y comportamiento que no están en línea con tus valores y con quién quieres ser, entonces busca de manera proactiva formas de crecer y transformarte.
Por más difícil que sea evaluar quiénes somos y dónde estamos, debido al temor y la incomodidad de enfrentarnos a nosotros mismos, es necesario que lo hagamos para el crecimiento y el desarrollo personal.
Los esfuerzos por vivir nuestra vida mejor vienen con una conciencia y un compromiso concertados. La disposición y el deseo de vivir la vida de manera más significativa es lo que nos impulsa a hacer más, a veces más allá de lo que normalmente podemos considerar o pensar que somos capaces de hacer.
Porque la vida es muy bella, cada momento de cada día es muy valioso. Podemos decidir tratarla de esa manera en nuestras intenciones y acciones. Decidamos eligir vivir nuestra mejor vida, sin importar el tiempo que nos quede por vivir.
Fuente: blogs.psychcentral.com